Nueva York, NY — Una encuesta publicada esta semana por la Oficina de Estadísticas Laborales ha concluido que durante el mes de mayo el país ha comenzado a vivir un descenso en el número de personas desempleadas. Esto supone una ligera mejora para muchas personas trabajadoras, quienes han sido afectadas con pérdida de empleo debido a la pandemia del coronavirus (COVID-19). La encuesta concluye que durante mayo, el empleo aumentó sobre todo en los sectores de ocio, hospitalidad, construcción, educación, servicios de salud y comercio minorista. 

Para continuar investigando cómo la pandemia del coronavirus está afectando a las trabajadoras del hogar en los Estados Unidos, durante las últimas semanas de mayo La Alianza también continuó encuestando a trabajadoras del hogar a través de su servicio instantáneo de mensajería. De las más de 3,000 trabajadoras que completaron la encuesta semanal, los resultados constataron los datos de la Oficina de Estadísticas Laborales: las semanas del 25 de mayo y del 1 de junio mostraron un descenso en el porcentaje de trabajadoras del hogar encuestadas sin trabajo. 

Sin embargo, y a pesar de este descenso, en esas mismas semanas el 76% de personas encuestadas por La Alianza dijeron tener menos trabajo del que tenían antes del coronavirus. Adicionalmente, 1 de cada 5 encuestadas que dijo trabajar para sus clientes habituales también comentó que sus clientes pagan menos que antes del coronavirus. 

Este sueldo reducido se debe, según las encuestadas, principalmente a una reducción de sus horas. El 55% de las encuestadas que respondió ganar menos que antes del coronavirus dijo que sus empleadores redujeron sus horas, el 32% dijo que redujeron su salario, y el 11% expresó obtener tanto horas reducidas como salarios reducidos.

La Oficina de Estadísticas Laborales constata que las mujeres suponen menos de la mitad de las personas empleadas en total y según el Instituto para la Investigación de Mujeres (IWPR, sus siglas en inglés), las tasas de desempleo son un 16.5% entre las mujeres negras y un 19% entre las mujeres hispanas, comparado con un 13.3% entre el resto de la población.

El impacto a largo plazo para las trabajadoras del hogar

El IWPR enfatiza que el impacto de la pérdida de empleo debido a la pandemia del coronavirus será duradero, sobre todo para las mujeres de color y las que son las fuentes principales de ingresos de sus familias. Los motivos detrás de la duración, explica el comunicado de prensa, se deben a que en general las mujeres tienen más dificultad de conseguir cuidado de sus niños y suficientes empleos disponibles. 

El Instituto también advierte de que a medida que las mujeres regresan de nuevo al sector laboral, será cada vez más difícil encontrar empleos de larga duración y, como consecuencia, será cada vez más difícil que puedan proveer a sus familias.

Esta dificultad de llegar a fin de mes y proveer a sus familias durante la pandemia del coronavirus también lo han reflejado las trabajadoras del hogar encuestadas por La Alianza. En encuestas realizadas entre el 5 y 7 de junio, por ejemplo, la mayoría (59%) de trabajadoras del hogar dijo no poder pagar su renta o hipoteca para el mes de junio. Más de la mitad (53%) de encuestadas esa misma semana también dijo no estar segura de poder pagar los alimentos en las próximas dos semanas (8 de junio y 15 de junio). Esta situación se vuelve más grave cuando consideramos que el 75% de las encuestadas dijeron ser la principal fuente de ingresos de su hogar.

Medidas para paliar los efectos de la crisis

La crisis del coronavirus ha resaltado la necesidad de implementar medidas que puedan garantizar que las mujeres trabajadoras del hogar puedan sostenerse a sí mismas y a sus familias. En la encuesta de La Alianza realizada entre el 1 y 3 de Mayo, 86% de las trabajadoras del hogar encuestadas no había solicitado beneficios de desempleo, por ejemplo, y más de la mitad (54%) dijo no calificar para este programa, y 30% no sabían si califican. Asimismo, 91% de las encuestadas no habían solicitado licencia remunerada a sus clientes desde que inició la pandemia.

C. Nicole Mason, presidenta de IWPR expresó la importancia de buscar soluciones y medidas para salvaguardar a las personas más impactadas por la crisis del coronavirus. 

“No podemos dejar a nadie de lado: los esfuerzos de ayuda y recuperación deben incluir apoyo y disposiciones que garanticen que las mujeres puedan reingresar a la fuerza laboral y/o puedan cuidar a sus familias,” dijo.

“Estos apoyos incluyen licencia por enfermedad remunerada, subsidios mejorados para el cuidado de niños y beneficios de desempleo ampliados, entre otros esfuerzos y programas probados que ayudarán a las familias a llegar a fin de mes,” concluyó.