Con julio en marcha, también avanza la temporada de huracanes en el Atlántico —y este año, las autoridades prevén que sea una de las más activas de las últimas décadas.

Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), se esperan entre 17 y 25 tormentas, de las cuales entre 8 y 13 podrían convertirse en huracanes, y hasta 4 podrían ser huracanes mayores. Esta previsión está relacionada con el regreso del fenómeno de La Niña y el calentamiento inusual del Atlántico, condiciones que ya han generado temporadas intensas como las de 2005 y 2020.

Para muchas familias, especialmente en zonas costeras o vulnerables, esto representa una amenaza real. Por eso, más allá de las noticias, es fundamental saber cómo prepararse para protegerse a tiempo.

Este artículo reúne pasos esenciales, consejos prácticos y recursos oficiales para actuar antes, durante y después del paso de un huracán.

Preparación básica: qué tener listo con anticipación

Prepararse no es solo cuestión de suerte: requiere organización. Un buen punto de partida es armar un kit de emergencia. Según la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), este debe incluir:

  • Agua (mínimo un galón por persona al día, por tres días)
  • Alimentos no perecederos
  • Linterna, pilas extra y radio de baterías
  • Medicamentos recetados
  • Artículos de higiene
  • Copias de documentos personales importantes
  • Cargador portátil para celular 

Tener este kit listo antes de que se anuncie una tormenta evita apuros de última hora y permite enfocarse en lo más importante: su seguridad y la de su familia.

También considere incluir en su kit:

  • Oxígeno portátil o equipo médico
  • Refrigeración para medicamentos
  • Cargadores especiales para dispositivos médicos 

Plan familiar: comunicación y evacuación

Contar con un plan claro puede marcar la diferencia durante una emergencia. Si vive con otras personas, asegúrese de que todos sepan qué hacer si hay que evacuar. Según Ready.gov, un plan familiar debe incluir:

  • Identificar por dónde salir si hay una emergencia
  • Establecer un punto de encuentro fuera de casa
  • Tener a la mano una lista de contactos de emergencia

Si vive en una zona de riesgo, revise con anticipación las rutas oficiales de evacuación y localice los refugios disponibles. Algunas ciudades permiten llevar mascotas o tienen espacios adaptados para personas mayores, pero es importante confirmarlo antes.

Si alguien en su hogar tiene una discapacidad o condición médica crónica, es recomendable registrarse con anticipación en los programas de asistencia para personas con necesidades especiales que muchos municipios ofrecen de forma confidencial. En este enlace (en español) puede encontrar más información.

“Las personas más afectadas por los huracanes suelen ser aquellas que no tuvieron tiempo o recursos para prepararse. Por eso insistimos tanto en la prevención”, explicó Daniel Brown, especialista del Centro Nacional de Huracanes, en entrevista con NPR.

Además, FEMA recomienda practicar simulacros de evacuación al menos una vez al año, para que cada persona en el hogar sepa claramente qué hacer, a dónde ir y cómo reaccionar ante una alerta real.

Proteja sus documentos y su vivienda

En momentos de crisis, muchas personas pierden documentos esenciales como pasaportes, actas de nacimiento, tarjetas de residencia o papeles migratorios. Para evitarlo:

  • Guárdelos en una bolsa impermeable o caja resistente
  • Tenga copias digitales (en correo electrónico o en la nube digital)
  • Incluya también tarjetas de seguro médico y recetas

También es importante asegurar su hogar:

  • Fijar objetos sueltos en exteriores
  • Reforzar puertas y ventanas
  • Revisar techos y drenajes para evitar filtraciones

Cuidado con las estafas

Después del paso de un huracán, muchas personas están vulnerables —y es justo cuando aparecen los estafadores. Según la Comisión Federal de Comercio (FTC), muchas personas reciben llamadas o visitas de supuestos contratistas, compañías de ayuda o donaciones falsas.

Es común recibir llamadas o visitas de supuestos contratistas, organizaciones de ayuda o campañas de donación que en realidad son falsas.

Para protegerse:

  • Desconfíe de quienes le pidan pagos por adelantado.
  • No comparta su número de seguro social ni datos bancarios.
  • Verifique con fuentes oficiales o comunitarias antes de aceptar cualquier tipo de ayuda.

Como advierte la FTC: “Los estafadores se aprovechan de la confusión y la urgencia después de un desastre. Saber identificarlos es parte de la preparación”. Más información en: consumidor.ftc.gov

Manténgase informada por canales oficiales

Las redes sociales ayudan, pero no todo lo que circula es cierto. Para recibir alertas confiables en español, puede:

También puede consultar recursos locales en español como:

  • 211.org, línea nacional para encontrar refugios y asistencia

Recuerde que, con preparación, información confiable y un plan claro, es posible reducir el impacto de estas tormentas y proteger lo que más importa.