Addy siente un profundo temor cada vez que debe entrar a una casa desconocida para realizar su trabajo, especialmente si hay perros. Ese miedo tiene una raíz concreta: años atrás, un empleador intentó abusar de ella y utilizó a un perro para intimidarla.
“Siempre estoy pidiéndole a todos los santos, a la virgen, rezando, para que no haya un perro y para que no me pase nada”, dice Addy. “Le he contado a algunas personas y dicen ‘eso ya pasó, ya deberías de superarlo, pero mi mente no lo puede superar”.
Especialistas explican que el trauma es una huella emocional que queda tras una experiencia dolorosa o violenta, capaz de reactivarse años después ante situaciones que recuerdan el hecho vivido.
Con los años, Addy se ha vuelto más selectiva con sus trabajos y ahora solo limpia apartamentos vacíos. Aun así, a veces no tiene alternativa y debe entrar a viviendas habitadas, donde el miedo vuelve a asomarse. Su trauma, dice, sigue siendo una herida abierta, una que no sabe cómo sanar después del abuso que sufrió.
La salud mental: un daño no reconocido
Hace tres años, un accidente laboral hizo evidente que Addy necesitaba ayuda profesional. Sucedió mientras limpiaba en un edificio de apartamentos.
“El elevador del edificio se cayó conmigo adentro, desde el piso 17”. Addy describe ese accidente como un punto de quiebre. “Fue como si todo lo que había vivido antes despertara otra vez… Estaba teniendo ataques de pánico, ataques de ira, ataques de ansiedad”.
Sin embargo, el seguro de riesgos laborales solo reconoció los daños físicos, pero no los psicológicos. Dice que el hecho de que no se reconozca lo que vive mentalmente en el trabajo es un doble castigo.
“Yo lo veo como más estrés, porque tengo que luchar para que me crean, para que alguien haga algo, para que entiendan que me siento mal”.
Obstáculos para la atención
Lo que Addy relata no es un caso aislado. El trabajo del hogar está asociado a altos niveles de estrés y vulnerabilidad emocional.
En una encuesta reciente de La Alianza,más de la mitad de las trabajadoras del hogar hispanas respondieron que su nivel de bienestar psicológico era bajo.
Los resultados revelan además que la inestabilidad económica, el aislamiento y la falta de protecciones laborales a los que están sujetas estas trabajadoras generan altos niveles de estrés y afectan su bienestar psicológico.
Sumado a esto, la mayoría de las trabajadoras del hogar en Estados Unidos no cuenta con seguro médico por parte del empleador, ni acceso a licencia por enfermedad. La falta de cobertura médica las deja por fuera de casi toda la atención psicológica o psiquiátrica.
Tal como lo vive Addy, quien ha intentado buscar ayuda, pero se ha topado con muchos obstáculos. “Hay muchas señales de que necesito apoyo psicológico, pero siempre encuentro las puertas cerradas”, cuenta.
Aunque tiene seguro médico, este no cubre terapia, y cuando busca atención por su cuenta, los costos son demasiado altos o los profesionales no hablan español.
Solo un 7% de los psicólogos con licencia en Estados Unidos se identifican como latinos o hispanos, y solo el 5.5% de los terapeutas pueden ofrecer servicios en español, según cifras de la Asociación Americana de Psicología.
Además de la falta de recursos, el estigma cultural sigue pesando. En muchas comunidades inmigrantes, hablar de salud mental sigue siendo un tabú. Esa percepción impide buscar ayuda, incluso cuando el sufrimiento es evidente.
Esa cultura del silencio coincide con lo que Addy describe: “nos han acostumbrado a que tenemos que guardar silencio para callar a las víctimas y proteger a los victimarios”.
Buscando cómo sanar
Ante la falta de atención formal, Addy encontró refugio en el arte. “Encontré un curso de arteterapia y descubrí que dibujar [me ayuda mucho]… Empecé a dibujar mi misma ansiedad y en cada línea como que se iba perdiendo esa ansiedad, esa depresión, ese coraje. Caminar [también] me empezó a ayudar muchísimo».
Además, ha buscado herramientas para comprender sus emociones. “He tomado cursos de programación neurolingüística y una certificación en mediación. No son terapias, pero me han ayudado mucho a poner límites, a comprender y validar a las demás personas”.
Cuando se le pregunta qué hace falta para cambiar las cosas, responde: “El respetar nuestro trabajo, reconocer que este trabajo es tan importante como el de ellos, es un trabajo que mucha gente denigra… Necesitan dejar de creer que el trabajo del hogar es para los esclavos inmigrantes que no tienen derecho a nada”.
Recursos en español para la salud mental
Recurso | Qué ofrece | Cómo acceder |
Línea 988 – Suicide & Crisis Lifeline (en español) | Atención gratuita y confidencial las 24 horas | Llamar al 988 y seleccionar la opción 2. 988lifeline.org/es |
Crisis Text Line (en español) | Apoyo emocional por texto, 24/7 | Envía HOLA al 741741. crisistextline.org |
Mental Health America (MHA) | Guías y materiales en español | mhanational.org/resources/recursos |
Therapy for Latinx | Base de datos de terapeutas bilingües | therapyforlatinx.com |
La Clínica del Pueblo (D.C./Maryland) | Atención médica y psicológica en español | lcdp.org/es |
Bienestar Mental Health Services (California) | Tratamientos con profesionales bilingües en salud mental y abuso de sustancias | Llamar al 866-590-6411 extensión 302 (Cuentan con personal bilingüe que puede atender su llamada en español) |