Nueva York, NY — Más de 15 millones de personas que viven en hogares en los Estados Unidos necesitan apoyo para hacer actividades de diario porque tienen discapacidades o problemas de salud. Esa cantidad se duplicará en los próximo 40 años, según un nuevo informe por el Instituto Paraprofesional de Salud (PHI). 

El reporte, “Imaginando el futuro de la atención domiciliaria,” publicado el 15 de octubre,  indica que muchas de esas necesidades no serán cumplidas porque el sector no invierte suficientemente en los trabajos de cuidado a domicilio. 

Hoy en día, existen más adultos entre 18 y 64 años (7.7. millón) que necesitan apoyo en los hogares en comparación a los adultos de 65 años y más mayor (7.2 millón), de acuerdo con datos del U.S. Bureau’s American Community Survey, citado por el estudio. Sin embargo, para el año 2060, se duplicará el número de  personas mayores de 64 años con necesidades; los de 85 años triplicarán. Aun así, el sector de cuidado no se está preparando para este crecimiento, ni tampoco mejorando la calidad de los trabajos. Dentro de la próxima década, se espera que 4.7 millones de trabajos tendrán que ser cumplidos.  

“Mientras que la población de EE.UU. viva más tiempo y se envejezca, se necesitará una fuerza laboral cada vez más grande para asegurar que los individuos con necesidades de apoyo personal puedan vivir independientemente en sus hogares y participar en sus comunidades,” dice el informe.

Unos de los factores más grandes contribuyendo al déficit de cuidado son los salarios bajos: un medio anual de $16,200. Por cada cinco trabajadoras, una vive por debajo de la línea de la pobreza y mitad del total recibe asistencia pública. Y los ingresos son aún más bajos para las mujeres de color, quienes representan la mayoría de las trabajadoras del cuidado.

En general, las personas de color constituyen muchas de las personas que necesitan ayuda a domicilio, pero son menos probables de recibirlo por falta de acceso resultando de la pobreza y diferencias en cultura.  

Para prevenir la brecha proyectada, los autores del reporte ofrecen 21 recomendaciones, incluyendo pólizas que puedan garantizar seguridad económica. Entre ellas, se recomienda mejorar la calidad de trabajo para que haya mejor pago, sistemas de seguro a nivel estatal y federal, y oportunidades para el desarrollo profesional.  

Según el reporte, también es importante fortalecer la relación entre las trabajadoras de cuidado a domicilio y sus clientes. Esto incluye darle entrenamiento y autorización para que se puedan mantener en los trabajos y mantener datos y reportajes para poder entender mejor las retenciones en trabajo. Si se puede monitorear más el labor de cuidado, dice el informe, se podrá evolucionar las oportunidades de crecimiento y crear más especialidades. 

“Mejorando la continuidad del cuidado para cada consumidor requiere mejorar la calidad de los trabajos y ofrecerle apoyo a los trabajadores para que sean animados y puedan mantenerse en el sector laboral,” dice el informe. “Asistiendo a los consumidores para que puedan alcanzar sus metas requiere que las trabajadoras sean adecuadamente formadas, supervisadas y autorizadas para dar el apoyo de más alta calidad posible.” 

Lee el reporte completo en inglés, aquí