Durham, NC — Un nuevo informe avisa que la cafeína, las leches alternativas y bebidas azucaradas pueden ser dañinas para la salud de los niños desde el nacimiento hasta los cinco años. La investigación, publicado en septiembre por la Investigación Sobre Alimentación Saludable, ofrece recomendaciones de cuatro organizaciones claves en la salud y alimentación, incluyendo la Academia de Nutrición y Dietética, la Academia Americana de Odontología Pediátrica, la Academia Americana de Pediatría y la Asociación Americana del Corazón.
Según el informe, muchos niños están tomando bebidas que divergen de las recomendaciones saludables. Esto es debido a muchos consejos de salud que son inconsistentes y que causan confusión a los padres y a las trabajadoras del cuidado. El consumo de bebidas azucaradas es común en los niños de dos a tres años, y hay mucha disparidad según raza y estatus socioeconómico, dice el reportaje. La investigación también explica novedades de bebidas que han sido introducidas en la última década, como agua y tés con sabor, bebidas fermentadas, y leches alternativas (soya, almendra, avena, etcétera). El informe excluye la leche de pecho y fórmula para bebés y no toma en cuenta situaciones especiales médicas que requieren guías de nutrientes específicas.
Los expertos presentan estas recomendaciones:
Dependiendo de la edad, el agua y la leche de vaca y maternal son los más recomendados para una dieta saludable.
Los infantes desde el nacimiento hasta los seis meses no necesitan tomar agua suplementario si ya están bebiendo leche humana. No se recomienda darle leche pasteurizada a los bebés menores de un año. Dentro de uno a dos años, el informe dice que se puede comenzar a introducir la leche pasteurizada con cien por ciento de grasa, tomando entre 16 a 24 onzas cada día. Desde los dos años hasta los cinco, los niños deben de comenzar a tomar leche pasteurizada sin grasa o baja en grasa (1%): hasta 16 onzas para niños entre dos y tres años; 20 onzas entre cuatro y cinco años. La consumición de agua depende de la cantidad de leche que estén tomando los niños: entre los seis meses y un año se recomienda cuatro a ocho onzas; uno y tres años, 8 a 32 onzas; cuatro y cinco años, 12 a 40 onzas.
El jugo cien por ciento es recomendado—pero con limitaciones.
El jugo cien por ciento es extraído del líquido que se encuentra naturalmente en las frutas y vegetales, sin azúcar adicional ni ingredientes artificiales. Estas bebidas pueden ser un suplemento para los nutrientes importantes como la fibra dietética, vitamina C, magnesio y potasio. Aun así, según el informe, hay que limitar estos jugos para evitar las caries dentales y reducir la posibilidad que los niños beban líquidos azucarados durante el crecimiento. No se recomienda darle jugo a los bebés menores de un año. De uno a tres años se puede comenzar a dar jugos naturales, pero no más de cuatro onzas. Es recomendado dar no más de cuatro a seis onzas a niños de cuatro a cinco años.
No es recomendado ofrecer bebidas edulcoradas de bajas calorías, jugos azucarados, bebidas con cafeína, y leche de niño alternativa o con sabor.
Según los expertos, las leches alternativas y bebidas conteniendo ingredientes artificiales no les ofrece a los niños los nutrientes adecuados para una vida saludable. Igual, las bebidas altas en azúcar, como leche y jugos artificiales, sodas, bebidas de energía, y té, café y aguas azucaradas. Adicionalmente, el informe dice que las bebidas con cafeína no son apropiados para niños pequeños.
Para prevenir las caries dentales, no se recomienda usar tazas de entrenamiento frecuentemente.
El panel de expertos también considera el modo de consumición de bebidas importantes para la salud infantil. Se recomienda evitar que los niños beban leche y jugos de tazas de entrenamiento frecuentemente para reducir el riesgo de bacterias y problemas dentales. En vez, el informe sugiere usar tazas para cuando le sirvan a los niños pequeños, pero no se debe permitir que carguen el vaso durante todo el día. Adicionalmente, es recomendado empezar a enseñarle a los niños no tomar de botella al año y no acostar a los niños con una botella.
Pueden leer el informe en más detalle (en inglés) aquí.