Las Elecciones Presidenciales de 2024 están a la vuelta de la esquina, y a pesar de que el panorama político está dominado por los candidatos Demócratas y Republicanos, se destaca la presencia de dos candidatas latinas para los cargos de Presidenta y vicepresidenta: Claudia de la Cruz y Karina García.

Quiénes son las candidatas

De la Cruz, quien es madre, educadora, organizadora comunitaria y teóloga, se postula para la presidencia con el Partido por el Socialismo y la Liberación.

Nacida en el sur del Bronx en Nueva York, de padres inmigrantes de la República Dominicana, la candidata de 44 años ha dedicado su vida al activismo, centrándose en temas como la liberación de prisioneros políticos, el fin del bloqueo estadounidense contra Cuba y la justicia para Palestina.

En el 2004, De la Cruz fundó la organización Da Urban Butterflies (Las Mariposas Urbanas), que enseñaba a niñas y mujeres jóvenes de origen latino, liderazgo, activismo comunitario y empoderamiento. También se desempeñó como pastora de la iglesia Santo Romero de las Américas por ocho años.

Como Co-Directora Ejecutiva y cofundadora de The People’s Forum (El foro del pueblo) en la Ciudad de Nueva York, ha liderado un espacio de educación política y hogar cultural para organizadores, líderes e intelectuales de la clase trabajadora.

La fórmula presidencial de De la Cruz es Karina García, una organizadora y educadora Chicana, fundadora del Centro de Justicia en El Barrio en la Ciudad de Nueva York y miembro del Comité Central del Partido por el Socialismo y la Liberación.

García, quien aspira a la vicepresidencia, ha liderado campañas contra los abusos de los propietarios, el robo de salarios y la brutalidad policial, así como luchas por la justicia reproductiva, los derechos de los inmigrantes y la reforma de la ayuda financiera estudiantil.

Cuál es su propuesta

La propuesta de gobierno de estas candidatas es completamente anticapitalista, es decir, que se opone al sistema económico actual de los Estados Unidos, en el que las empresas son propiedad privada y el único objetivo del sistema económico es obtener ganancias.

Por el contrario, el objetivo de De la Cruz y García, es reducir la desigualdad y garantizar que todas las personas tengan acceso a las necesidades básicas por medio de un sistema económico y político en el que el gobierno o la comunidad posee y controla industrias, recursos y servicios clave, como la atención sanitaria y la educación. Dicho sistema se conoce como Socialismo.

Entre sus propuestas más audaces está la de transformar las cien corporaciones más grandes de Estados Unidos en propiedades públicas, incluyendo sectores como la salud, la educación y el cuidado infantil.

Proponen además que la atención médica, la educación superior, el cuidado de niños, la vivienda y un salario digno sean derechos constitucionales.

“La pobreza, la deuda estudiantil y la crisis climática no se resolverán perdiendo nuestro tiempo y nuestra energía apoyando a un partido que no nos sirve”, dijo García sobre el Partido Demócrata. “Tenemos que construir nuestro propio partido y realmente no tenemos mucho tiempo que perder. Estamos tratando de construir este movimiento que sabemos que realmente puede cambiarlo todo”.

Apoyo y crítica

La candidatura de De la Cruz y García ha generado un fuerte apoyo entre diversas comunidades y movimientos, especialmente por su enfoque en temas como la justicia social, los derechos de los trabajadores y la equidad económica.

“Es fantástico tener una campaña que sea específicamente socialista para poder explicarle a la gente qué es el socialismo y qué no es el socialismo y ampliar los horizontes de la gente”, dijo Jacquie Luqman, presentadora y productora de TRNN, con más de 20 años como activista.

Sin embargo, algunos críticos ven la campaña como ingenua e inútil en un país donde el socialismo es una ideología marginal. El senador Bernie Sanders ha sido el candidato de izquierda que más lejos ha llegado en una elección presidencial en Estados Unidos en los últimos años.

Pero De la Cruz dice que es urgente desafiar el sistema bipartidista con una alternativa radical para los votantes que buscan una opción fuera de los demócratas y republicanos.

“Creo que socavamos la disposición que tiene la gente a cambiar sus condiciones”, dijo De la Cruz. “La gente está dispuesta a comprometerse y activarse en la transformación de la sociedad desde la raíz”.

Aunque las posibilidades de victoria puedan parecer bajas, De la Cruz ha dicho que ve esta elección como un primer paso para mostrar a los estadounidenses una realidad diferente, demostrando que es posible desarraigar radicalmente los sistemas de opresión que les impiden prosperar.

“Entendimos que era necesario que pudiéramos intervenir en este proceso electoral porque es un proceso del que la gente habla durante la cena, un proceso que la gente sintoniza en las noticias, incluso si la gente no va a votar”, dijo De la Cruz. “Queríamos que la gente supiera que es posible transformar esta sociedad y mover a este país de un país capitalista brutal y violento a una sociedad socialista que realmente pone en el centro de la atención las condiciones e intereses de la clase trabajadora”.