Madison, WI — Hasta el 11 de octubre, el Centro de Cooperativas de la Universidad de Wisconsin está realizando una encuesta con el fin de fomentar la investigación y conocimiento sobre las cooperativas en la comunidad latina en los EEUU, así como para también conectar a las cooperativas y ayudar a que haya mayor colaboración entre ellas. Con los resultados de la encuesta se creará por primera vez un mapa interactivo y un directorio que liste a las cooperativas latinas de todos los tipos y sectores en los EEUU. 

“Esta iniciativa es para reconocer y mejor comprender el papel colectivo de las cooperativas latinas en la comunidad de cooperativas más general,” ya que “la comunidad latina ha sido una parte influenciadora e integral del movimiento de cooperativas en los EEUU,” comunica la página de la universidad. 

Según este grupo de investigación, a grandes rasgos “una cooperativa es una empresa perteneciente y gestionada de manera democrática por las personas miembros que utilizan sus servicios.” Cada miembro es a su vez co-dueño de la empresa, contribuye económicamente y asume tanto los beneficios de la empresa como los riesgos. También participa de manera democrática en la toma de decisiones, expresado normalmente con el derecho a voto. En una cooperativa, uno de los principios que rige es que cada persona contribuye y cumple con unas responsabilidades de manera igualitaria y cooperativa.

Hay muchos tipos de cooperativas, desde aquellas organizadas por y para gente trabajadora, consumidora, agricultora, o aquellas de otros grupos de personas que comparten ciertas necesidades económicas o sociales. Históricamente, las cooperativas se crearon como respuesta a los cambios socioeconómicos del momento, y han servido para satisfacer las necesidades de las personas que lo componen, detalla Lynn Pitman del Centro para Cooperativas de la Universidad de Wisconsin. 

Hay profesionales como las trabajadoras del hogar que también se han organizado para tener esos espacios y mejorar su vida laboral. Y gracias a esta organización, muchas cooperativas han logrado elevar los sueldos y mejorar las condiciones de trabajo para sus miembros.

La Colectiva, por ejemplo, con sede en San Francisco, es una cooperativa de trabajadoras del hogar unidas por el objetivo de proveer más trabajo a las mujeres inmigrantes. Entre sus muchas actividades, ofrecen talleres y formaciones sobre temáticas como limpieza eficiente, segura y menos tóxica, y también en que las mujeres inmigrantes trabajadoras del hogar puedan saber más sobre sus derechos. 

Otra cooperativa para trabajadoras del hogar, especialmente profesionales de limpieza, es Sí Se Puede!, ubicada en la ciudad de Nueva York. Esta cooperativa, creada en 2006 y ahora con más de 100 miembros, tiene como objetivo crear “trabajos de salario digno que se realizarán en un ambiente seguro y saludable, así como para proporcionar apoyo social y oportunidades educativas para nuestros miembros.” En su página web ofrecen información para los empleadores sobre qué incluyen los servicios de limpieza y cómo pagar un sueldo digno. 

Asimismo, las cooperativas ofrecen múltiples ventajas, como proveer a la comunidad de necesidades básicas como acceso a empleos con salarios dignos, acceso a alimentos ecológicos, acceso a viviendas asequibles, cuidado infantil y de adultos, y mucho más. Además, es una manera de impulsar el empoderamiento y autodeterminación comunitaria, ya que cada miembro cumple un papel en las decisiones que le afectan. 

Las cooperativas también crean la posibilidad de compartir un espacio seguro con otras personas afines. Así lo describe Joselyn Mendoza de la cooperativa Mirror Beauty Cooperative, una cooperativa creada en gran parte para ayudar a la comunidad latina trans e indocumentada a encontrar empleo. “La importancia de la cooperativa para mí es que es una oportunidad para crear más trabajos y crear un espacio que sea libre de discriminación,” comenta.

Para más información o si eres miembro de una cooperativa latina y te interesa completar la encuesta, puedes acceder aquí.