Nueva York, NY — El número de personas envejecidas está aumentando y, por lo general, no están envejeciendo de la manera más saludable. Según una encuesta reciente, la mayoría de personas en mayores en EE. UU. tiene múltiples condiciones de salud, pueden tomar hasta 10 medicamentos diferentes, y físicamente pueden tener dificultades para moverse. 

Cuidar de estas personas a veces puede ser complicado, y puede haber falta de información sobre cómo mejor cuidarlas. Según la misma encuesta, algunas profesionales del cuidado desconocen que hay medicamentos que interfieren con el bienestar mental del paciente, por ejemplo. Y hay otras que creen que la depresión es algo inevitable que ocurre cuando una persona envejece. 

La falta de acceso a una capacitación específica, combinada con la falta de un cuidado personalizado, puede influir en el bienestar, y ya si sumamos otros factores como poco acceso a transporte o pocas opciones nutricionales saludables, envejecer y gestionar la vejez, para muchas personas, les puede suponer una carga. 

Pero según la organización WebMD y la Fundación John A. Hartford, envejecer y cuidar de alguien que está envejeciendo no tiene por qué ser una carga, ni algo negativo. 

Para transformar la creencia de que envejecer es algo malo y para convertirlo en una experiencia positiva, concluyen que el cuidado debería ser un cuidado específico, tanto para las personas mayores como para las profesionales que les cuidan.

¿Qué significa que sea un cuidado específico para personas mayores?

El reporte destaca cuatro elementos principales que se debería tener en cuenta a la hora de cuidar de un paciente mayor: la importancia, la movilidad, los medicamentos, y la mentalidad. 

En cuanto a la importancia, el reporte sugiere que en este tipo de cuidado específico, lo que le importa a los pacientes y a las profesionales del cuidado debe priorizarse. Por ejemplo, para un paciente puede ser importante que sus doctores sepan qué tratamientos prefieren, y para una profesional, también puede ser importante comunicarse con los doctores. 

Luego, el reporte recomienda que las profesionales se aseguren de que el paciente se mueva de manera segura, sean conscientes, informadas e intencionadas con los medicamentos, y que estén preparadas para lidiar con cuestiones mentales como la demencia, depresión u otras afecciones.

El cuidado específico también busca un cuidado que se centre en los aspectos positivos del envejecimiento, además de recibir atención personalizada, de calidad, segura, y basada en lo que quieren tanto el paciente como la cuidadora, para así mejorar su calidad de vida.

Tanto los pacientes como las profesionales del cuidado dijeron que tener una lista de preguntas para hacerle al doctor así como recursos en línea les ayudaría a sentirse más cómodas para pedir este tipo de cuidado de los proveedores de salud.

En su cuenta de Twitter, la Fundación John A. Hartford publicó que “es hora de adoptar un enfoque diferente del envejecimiento, uno que valore a cada persona mayor como un individuo con necesidades y deseos únicos.”